El aceite esencial de eucalipto, proviene del árbol de Australia Eucalyptus globulus, y cuenta con una larga lista de aplicaciones. Los aborígenes australianos lo usaban para curar heridas, infecciones por hongos, para reducir la fiebre y como expectorante.
Combate la sequedad nasal y descongestiona la nariz, echando en un bol con agua caliente diez gotas de a.e. de eucalipto y con una toalla cubrimos la cabeza, inhalando los vapores.
También se puede echar unas gotitas en un aceite portador como el aceite de almendras , y dar un masaje en el pecho para aliviar la congestión nasal y la tos.
El aceite de eucalipto al tener propiedades anti-bacterianas y un aroma fresco , lo podemos utilizar con nuestros productos de limpieza, añadiendo unas gotitas a nuestros productos de limpieza.
Gracias a la acción antibacteriana que posee el aceite de eucalipto es un buen limpiador dental, ya que elimina los gérmenes de la boca, reducir la placa y combatir los trastorno de las encías.
Podemos hacer nuestra propia pasta de dientes:
- 25 gotas de aceite de eucalipto
- 6 cucharadas de aceite de coco
- 6 cucharadas de bicarbonato sódico
- 1 cucharada de stevia en polvo
Lo mezclamos todo hasta que quede una pasta homogénea, y lo guardaremos en un bote de cristal, esta pasta no está recomendada para niños.
Se puede usar como enjuague bucal, aportando un aliento fresco.
En aromaterapia también puede resultarnos beneficioso, ya que es un aceite refrescante y estimulante, también sirve para potenciar la concentración, tener altos los niveles de energía, y cuando no podamos respirar al estar resfriados.
Comentarios